Que los personajes de recordados antiguos juegos de mesa vuelvan a cobrar vida décadas después de la mano de su dibujante original es emocionante. Isidre Monés nos enseña paso a paso cómo ha dibujado el cartel del 7º Festival Internacional de Juegos de Mesa Córdoba 2012.
Tenemos que recordar que el incio del fin de nuestra particular búsqueda del Imperio Cobra se debió a que el propio Isidre Monés se dejó ver por páginas dedicadas al recuerdo de los juegos de mesa Cefa de los años 1980s. Contactamos con él y nos proporcionó un nombre, Pepe Pineda, como autor de aquellos juegos. Así pudimos encaminarnos a completar nuestra búsqueda tras muchos años de incógnitas.
En estos años Isidre Monés ha continuado su carrera como dibujante e ilustrador en muchos medios, incluso en algunos juegos de mesa de otras compañías, pero de estilo bien distinto. Nuestra idea estaba clara; ¿podíamos hacer que Isidre volviera de alguna forma a los juegos tantos años después? El cartel de nuestro Festival 2012 era la oportunidad.
Y él aceptó encantado.
Tras varias propuestas decidimos conjuntamente que el cartel sería un guiño-continuación de una conocida ilustración del año 1986 que mostraba juntos a varios personajes extraídos de los juegos de mesa Cefa de entonces. Comunicamos a Isidre algunos detalles importantes que debía incluir en el cartel y se pusó manos a la (c)obra.
Bocetos previos de Isidre Monés.
Desde este momento continuamos la historia del cartel del Festival 2012 atendiendo a las palabras del artista Isidre Monés:
_Recibí con gran ilusión la propuesta de ilustrar un cartel para el "Festival 2012" de juegos de mesa de la Asociación Cultural Jugamos Tod@s.
Como yo ilustré hace unos 30 años la mayoría de juegos de aventuras "Cefa", acordamos darle al dibujo un aire "Imperio Cobra", el primero y más famoso juego de la serie.
Encontré por casa una carpeta editada en el 86 del "Club de la Aventura" y pensamos en hacer un homenaje a aquella pieza (ya histórica):
Cada juego una aventura.
Primero suelo hacer varios bocetos en lápiz sobre papel din A4, hasta dar con el encuadre y escena adecuados.
Amplío el boceto elegido a tamaño Din A3, bueno para trabajar la ilustración, y estudio los elementos por grupos o por separado. En papel vegetal, repaso con un rotulador de punta fina y le doy volumen al estilo clásico (cruzando rayas), que me ayudará luego para situar el volumen de color.Calco el boceto sobre papel de acuarela, bastante grueso para que no se ondule luego con la acuarela, y bastante delgado a la vez para ver al trasluz.
Nota: Durante 20 años he usado una mesa transparente, pero se escacharró y he vuelto como en el 86 al socorrido cristal de ventana.
Perfilo el dibujo con un par de rotuladores de punta fina, 0'1 o 0'2 Staedler o "S" Faber Castell, son los mejores resistiendo el agua posterior.
El rótulo del cartel va aparte. Es un rótulo dibujado a mano, siguiendo un estilo de letra antiguo/bizarro (sin un modelo concreto) que me indicó Pepe Pineda para el juego "En Busca del Imperio Cobra" hace un montón de años.
El Siguiente paso es empezar a dar color.
Muchos compañeros comienzan por el fondo, yo nunca lo hago, considero que los colores que mandan son los de los personajes o elementos, carne, ropas concretas... mientras que el fondo es aleatorio y lo podemos adaptar y entonar o contrastar segun convenga.
Tampoco doy un color plano a cada elemento para dar volumen a continuación, sea en seco o en húmedo, de hecho la acuarela (no asi el acrílico) una vez seca, puedes extenderlo y degradarlo.
Antes usaba (durante 30 años) acuarelas líquidas, ahora, prefiero las pastillas, son más cómodas de usar, y dan un cierto "cuerpo" más pictórico, que se diferencía del aerografiado al uso por ordenador.Sobre el papel blanco, doy volumen a los personajes con el color tonal más oscuro, mi intención es asegurar el contraste.
Creo que hay dos tipos de ilustradores, los más coloristas y los más dibujantes.
Yo soy de esos últimos, y procuro el contraste más que por matices de color, por contraste de intensidades.
Lo que más me preocupa del color es la intensidad y el contraste frio/caliente.
Ilustradores muy pictoricos que confían mucho en el matiz, pueden colocar un verde oliva contiguo a un siena, (con o si perfil) de una intensidad parecida, y en la producción en papel, se confundiran, fijo.
El dibujante actual, que trabaja por pantalla, se basa en una ficción, el color luz, que luego se transformará en tintas si media una impresión (libros, revistas). La pantalla todo lo soporta, luego los resultados (ahora ya no existen pruebas de grabado, y no se si de tiraje) son una sorpresa.
Trabajando sobre papel las sorpresas son menores, pues puedes prevenirlas.
A menudo escaneo mis trabajos sobre la marcha y los desaturizo, para comprobar que el efecto en blanco y negro es el mismo (en ocasiones mejora) y el contraste está garantizado.
Hasta aquí lo manual, que es casi todo. Realmente a mi nunca me gustó nada la aerografía: reservas, mascarillas que casi nunca usaba, polvo coloreado por las paredes, y manchones y escupitajos de la pistola de marras, la odié 30 años... Tanto es así que conseguí ser de los pocos que trabajé en más de 50 libros para Disney, dando el color a mano, excepto algun fondo y los cielos.
Esto es lo que ahora consigo con el ordenata; liberarme de la aerografía convencional, pero atención, !sólo en esos casos! !!Gracias Photoshop!!
Los fondos con aerografía eran un palo, asi con un sencillo programa (y la experiencia de muchos años) es más fácil, puedes rectificar, y lo que es mejor, crear nieblas y vapores, fundir y entonar en un pis pas. O casi.
Y lo mismo para dar aspecto metalizado al rótulo, mucho más fácil.
Hasta aquí el trabajo de Isidre.
Ha sido un placer, gracias Isidre. No dejes los juegos nunca ;o)
¡Nos jugamos!