La Société des Auteurs de Jeux de Francia informa sobre un lamentable caso de mala praxis editorial.
Se ha producido un caso de robo de ideas en el mercado francés de juegos de mesa y la Société des Auteurs de Jeux, SAJ, ha reaccionado con este comunicado (adaptado desde el francés):
(...) Regularmente, ya sea por correo electrónico o en el grupo de Facebook, una de las primeras preguntas formuladas por creadores noveles es invariablemente ésta: "¿Cómo evitar ser robado por una editorial?".
No vamos a entrar en los detalles del tema en este comunicado. SAJ realizará próximamente un documento que hable de ello, escrito con la ayuda de un experto para resumir el tema. Pero generalmente tratamos de calmar la paranoia de estos creadores preocupados: en Francia, ya que no hay forma efectiva de proteger legalmente las reglas de un juego de mesa, la mejor manera de asumir la paternidad de un juego es más bien mostrarlo públicamente al mayor número de público (o también enviar carta a INPI [Organismo francés de protección de obras culturales]). Como la comunidad de juegos sigue siendo muy alegre y honesta en sus prácticas, cualquier plagiador obvio sería rápidamente "asediado" por la comunidad. Esta situación de todos modos casi nunca sucede.
Ahora parece que se ha producido una excepción a esta regla. La editorial Wonderdice hoy lanza una pre-venta para un juego que un autor, François Bachelart, le presentó hace unos años. El mencionado editor incluso propuso un contrato para el prototipo, llamado "Nostromo", que nunca se firmó. Dada la información que tenemos, parece que el editor ha "robado" su juego a este autor, decidiendo desarrollarlo y publicarlo sin su consentimiento, sin su nombre y sin derechos de autor.
La Sociedad de Autores de Juegos SAJ solo puede condenar enérgicamente esta actitud y ofrecer todo su apoyo a François. A falta de acciones legales, caras y de resultado indefinido debido a la situación ambigua de los juegos de mesa legalmente, por ahora la única acción disponible es informar a los autores y a los jugadores de las malas prácticas de Wonderdice, para que esta editorial se encuentre con el fracaso que se merece.
Sin embargo, recalcamos que este triste caso es solo una excepción: la relación entre autores y editoriales suele ser de confianza. Específicamente, la distribuidora Edge [de Asmodee] se ha negado a distribuir el juego, y los jugadores y reseñadores que han conocido esta historia se esfuerzan por informar acerca de la clara deshonestidad de Wonderdice y, por supuesto, evitan comprar el juego. El mundo lúdico reacciona bien, lo cual no es una sorpresa para nosotros.
Las reglas del prototipo Nostromo original están aquí, y las reglas del juego de Wonderdice aquí.
Solo para dejar constancia y que no encontréis el juego de improviso, vamos a enlazar la web de la editorial Wonderdice y la web de preventa internacional del juego en cuestión (en inglés), que usa la franquicia de Aliens (legalmente, eso sí): alientheboardgame.com - ¡Un producto que es una idea robada!
La web Tric Trac ha contactado con la editorial Wonderdice, que declara que "el juego es una creación realizada internamente y no aparece ningún nombre de autor en el proyecto".
La situación comunicada por SAJ tiene similitudes con lo que puede ocurrir en España - Nosotros también recibimos con regularidad mensajes de personas que han creado un juego y se preocupan pro su protección antes de lo debido. El consejo es el mismo: Enseña el juego, interésate por mejorarlo, y hazlo jugar en eventos y por parte del mayor público posible.
Que existan empresas que se aprovechen de ideas ajenas es característico de mercados de juegos por desarrollar, como ocurría en España hace unos años (con los flagios a la cabeza) y por fortuna, aun sin remitir, hoy en día solo son situaciones muy excepcionales (aunque alguna persista que clama al cielo).
Imagen de Tric Trac: Prototipo el autor (2010) y juego vendido por la editorial sin permiso (2018).
No han cambiado ni el título.
La asociación de autores de juegos de mesa francesa nació con el nombre de SAJ (Société des Auteurs de Jeux), en verano de 2017.
Guarda paralelismo con la veterana e influyente SAZ (Spiele-Autoren-Zunft), la asociación de autores de juegos en Alemania.
En España existe Ludo, la asociación española de autores, ilustradores, diseñadores gráficos y traductores de juegos de mesa.
Actualización: Otra web francesa, Ludovox, ha entrevistado hoy a Nathanaël (CEO consejero de Wonderdice) en representación de la editorial:
"Nunca hemos negado haber estado en contacto con François Bachelart. Él, de hecho, nos mostró su proto hace 4 años. El juego podría funcionar con un poco de desarrollo y con la licencia de Alien. Le dijimos que estábamos interesados, y resultó que CMON podría estar potencialmente dispuesta a distribuirlo a los EE. UU. Entonces empezamos a aprender sobre cómo obtener esta licencia con Fox. Pero CMON luego retrocedió, juzgando el juego demasiado familiar para su audiencia."
La editorial decidió seguir adelante con el desarrollo del juego. Según el editor de Wonderdice, la editorial ha desarrollado su juego durante un año y medio con un equipo de beta testers para finalmente presentar un juego "completamente diferente" y que "no tiene nada que ver con el juego familiar de partida"
"(...) la falta de experiencia y el estrés relacionado con la licencia se interpusieron en el camino cuando tomamos la decisión de hacerlo solos. Nunca nos dimos cuenta de lo que se estaba gestando hasta que explotó en nuestra cara "
Desde que esta polémica saltó el lunes pasado, dice el editor que han recibido "insultos, amenazas, y llamamientos a un boicot que está prohibido por la ley". Y también que:
"Sin embargo, también le propusimos a François que hiciera un juego familiar basado en su Nostromo, con un aspecto más caricaturesco."
El autor François Bachelart reconoce haber recibido esta propuesta, pero no la ha considerado seriamente dado el contexto actual: "El mejor resultado para mí es que abandonan el proyecto".
Ludovox también advierte que el juego anterior publicado por estos editores, titulado Play Me (2014), atribuido a Aldébaran Geneste, el otro director de Wonderdice, tiene problemas del mismo género (en los que no ha podido profundizar todavía) con otro autor, Martin Wolyo.
¡Nos jugamos!