La autora era una mujer: Kathryn L. Connors.
Los juegos de mesa en el siglo XX no se acreditaban por lo general. En la actualidad las grandes jugueteras siguen sin hacerlo en la mayoría de sus publicaciones.
En su momento no sabíamos quién había creado el juego HeroQuest de MB. Años después se supo que el autor fue Stephen Baker.
Stephen Baker creó el juego base y sus principales expansiones.
MB (Hasbro) publicó otras expansiones de cuya creación no teníamos datos (salvo que no fueron obra de Stephen Baker). Con el paso del tiempo se han ido identificando varias de aquellas personas autoras: Scott Haring (Barbarian Quest Pack), Tom Wham (Dwarf Quest -no llegó a publicarse), Richard Borg (Wizard Quest -no llegó a publicarse).
Bocetos y viejos papeles de gente trabajadora o implicada en HeroQuest aquellos años en Games Workshop o MB han sido fundamentales en las investigaciones.
También se fueron identificando a ilustradores implicados (Incluso antes que las personas autora de los juegos): Les Edwards, Gary Chalk, Rick Grayson, o el artista Don Kueker -Hay que señalar el trabajo de la web de Toco.
Faltaba identificar quién creó la expansión Elf Quest pack (1992), recientemente reeditada como La Maga del Espejo (2023).
Con al reedición moderna del juego HeroQuest, y una mayor concienciación sobre la autoría de los juegos, el interés por encontrar a las personas creadoras se ha avivado.
En Elvyler se cuenta cómo ha sido posible encontrar a la autora del Elf Quest pack y se le hace una entrevista a ella misma: Kathryn L. Connors.
Otras personas creadoras de expansiones de HeroQuest fueron fichadas por MB (Hasbro) desde las oficinas de TSR (editorial del juego de rol D&D de Gygax & Arneson). Kathy no trabajaba para TSR, pero sí su pareja, el autor de juegos de rol William Connors.
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Tuve la suerte y el honor de que me eligieran para crear el pack de los elfos. Claro que tenía una amplia experiencia en juegos de mesa, años de jugar a numerosos juegos y fantásticos contactos creativos y experiencias con gente del sector, pero, simplemente, estaba en el lugar adecuado en el momento adecuado. Para que entiendas cómo acabé creando una expansión de HeroQuest, mi marido William W. Connors trabajaba en TSR cuando salió HeroQuest y mucha gente en TSR lo jugaba. Yo estaba criando a un niño de un año y otro de dos años por aquel entonces y para mí era fantástico porque podía pensar una aventura, dar de comer a los niños y llevarlos a la cama, y aún me quedaba energía suficiente para hacérsela jugar a Bill cuando llegara a casa. La sencillez de la mecánica me permitía dedicar mi energía a la creatividad de la trama, los puzles, etc. Jim Ward [escritor de D&D] sabía que Bill jugaba mucho a HeroQuest en casa (teníamos dos juegos americanos, así como la versión de Games Workshop, la Fortaleza de Kellar y las expansiones del Señor Brujo), así que le preguntó si quería escribir la expansión de los Elfos, pero Bill no quería arriesgarse porque tenía un contrato de exclusividad con TSR y no quería poner en peligro su trabajo. Bill sugirió que podía escribirla yo, ya que era quien lo llevaba todo el tiempo en casa. Cuando me lo contaron, Jim le hizo un guiño a Bill y le dijo algo así como: "Claro, K-A-T-H-Y puede diseñarlo". Bill respondió seriamente: "Sí Jim, ella puede". Y así, ¡tuve el honor de diseñar una de las dos expansiones [de personajes solitarios] que saldrían a la venta!
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Conseguí una copia gratuita de la expansión del Elfo y gané más dinero por palabra que mi marido en toda su vida. ¡Nunca le he dejado olvidar eso!
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Ella no llegó a hacer más juegos:
No... Volví a la universidad para obtener un título en primera infancia. Me enamoré de las personas con discapacidades socioemocionales y acabé como especialista en comportamiento y conferenciante en la materia, además de trabajar con jóvenes con problemas y encarcelados -que, por cierto, ¡aprendieron mucho jugando a juegos en mi clase!
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Otra autora que sale a la luz.
Gracias a Elvyler, a Ye Olde Inn y a los usuarios HispaZargon y Lucapaschi (comprador de viejos documentos de MB en subasta) por su éxito.
¡Nos jugamos!